jueves, 15 de septiembre de 2011

PRIMER PARCIAL DEL PRESIDENTE HUMALA: APROBADO


Encuestas nacionales favorecen la gestión presidencial hasta el momento
Considero que por el bien de la gobernabilidad en nuestro país, todos deberíamos alegrarnos cuando a nuestras autoridades ya sean locales, regionales o nacionales, les va bien en su trabajo, en este caso, el trabajo que el pueblo democráticamente les ha encargado realizar; y digo esto porque hay una necesaria correlación positiva en cuanto a la aprobación de la gestión de un gobernante y el sentir de bienestar por parte de la población. Es por eso que en esa actitud, es que debemos recibir con agrado el resultado de las últimas encuestas nacionales de las empresas DATUM e IMASEN que le dan a nuestro mandatario una muy interesante aprobación que bordea el 70% a nivel nacional, teniendo un 17% que lo desaprueba y solo un 13% que no sabe, no opina; obteniendo con ese resultado, subir 15 puntos entre julio y setiembre, teniendo como referencia que iniciando su gestión, nuestro Presidente iniciaba con un 55% de aprobación y en la anterior encuesta realizada en agosto, ya se empezaba a notar la subida con un 62% de respaldo popular.
Asimismo tenemos que tener en cuenta que, esta aprobación no sólo se refleja en la figura del Presidente, sino que también atañe a las principales figuras de gobierno como son el Premier Salomón Lerner Ghitis y el Presidente del Congreso Daniel Abugattás, quienes han recibido un 41% y 45% respectivamente de aprobación, manteniendo la tendencia ascendente a comparación de la encuesta anterior (agosto), con lo cual podemos deducir que hay una señal positiva en cuanto al manejo del Gobierno en su conjunto por parte del oficialismo, en el poco tiempo que va de su gestión.
Pero, ¿Qué características podemos encontrar en cuanto al manejo del Presidente y su Gobierno, que ha trascendido en una mayoritaria aprobación por parte de la ciudadanía? Pienso que muy aparte de los aciertos que son evidentes como la estabilidad económica, el gravamen minero, los proyectos sociales en marcha, la ley de consulta previa, la creación de nuevos ministerios con enfoque social, etc. Tiene mucho que ver la actitud tomada del Presidente, principalmente en tres aspectos: Un primero aspecto importante es la política de: Más hechos, menos palabras; sin duda ese es el mejor legado del candidato presidencial que le ganaba a todos en segunda vuelta Lucho Castañeda, quien como Alcalde Metropolitano, se caracterizó por su mudez al extremo, pero que compensaba muy bien, con las obras que realizaba y es por eso que mantenía una positiva aprobación por parte de los limeños en casi toda su gestión, aunque ese detalle finalmente no le alcanzó. En este aspecto hay que tener en cuenta también que ambos, son consientes que no gozan de una elocuencia grandiosa y que muchas veces el nerviosismo los traiciona; por lo que centrándonos en el Presidente, vemos que le viene dando resultados, la estrategia de expresar sólo lo necesario, en el escenario adecuado, y algo innovador como es aprovechar las redes sociales para apoyar alguna iniciativa o dar a conocer su agenda de gobierno.
Un segundo aspecto es: el cumplimento de las promesas electorales; y esto se debe a que el Presidente está siguiendo la tan cuestionada Hoja de Ruta que presentó en la segunda vuelta electoral, y que fue con la cual concertadamente, ganó las elecciones presidenciales. Esto es sin duda un mérito para él y un hecho inusual para los peruanos, quienes nos vemos confrontados cada vez que hay elecciones, entre lo que propone un candidato y lo que finalmente realiza en el gobierno, una vez habiendo alcanzado el objetivo. Por lo que la ciudadanía encuentra que se está siendo consecuente con lo prometido y lo concretado hasta ahora por la actual gestión, y si a eso se le puede agregar que, se está gobernando dentro de un equilibrio de fuerzas, entre derecha e izquierda; impulsando un crecimiento social de mercado por un lado, pero asimismo, fortaleciendo la inclusión y el desarrollo social por el otro.
Un tercer y último aspecto es la generación de confianza política; y en este punto tengo que previamente citar lo planteado por el Profesor de Ciencias Políticas, Steven Levitsky (Universidad de Harvard), quien señala que: La desconfianza pública es peligrosa para la democracia. Si la gente no confía en las instituciones, estará menos dispuesta a defenderlas y más dispuesta a apoyar figuras (outsiders, golpistas) que las atacan. La desconfianza es una receta para el voto “antisistema”. Por lo que, dicho aspecto es crucial para el fortalecimiento de la democracia, en donde se tiene que buscar acortar la brecha de desconfianza dejada por anteriores gobernantes como Fujimori, Toledo o García, y esto se tiene que lograr, no solamente por medio del cumplimiento de las promesas electorales, sino también a través de gestos democráticos que para algunos les parece innecesarios como la realización del Pleno del Congreso en Ica, pero que para la ciudadanía, sobretodo del sector donde se realiza la sesión, es muy significativo y consolida de cierta forma la legitimidad de sus autoridades.       
Pero no todo siempre es color de rosa, de hecho que se están cometiendo errores como en toda gestión, pero esperemos que no sean errores significativos de los cuales, una oposición todavía tibia, pueda colgarse para “bajarse” al Gobierno; hasta el momento la derecha y la extrema derecha están todavía desarticuladas y se han quedado con pocos argumentos para iniciar una ofensiva contra el gobierno, por ahí algunas críticas sin sustento, pero el Gobierno no se debe descuidar, sobretodo deslindando y denunciando todo acto de corrupción y aprovechamiento de poder, así provenga desde su propia bancada; casos como los del congresista Amado Romero y su vinculación con los mineros informales en Madre de Dios o el caso del congresista Walter Acha Baca, quien hasta ahora no deslinda su vinculación con transporte de mercadería para el narcotráfico no debe quedar en el tintero y debe ser investigado inmediatamente. Pero no solo le debe preocupar al Gobierno la oposición, sino que también hay que tener en cuenta que la luna de miel se está acabando, y que es la misma población la que está empezando a ponerse de pie para exigir sus diversos reclamos, por lo que una política de prevención de conflictos, es más urgente que nunca.

No hay comentarios:

Publicar un comentario